La directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para el Desarrollo de la ONU para la Mujer (UNIFEM), Inés Alberdi, aseguró hoy que para erradicar la violencia de género es necesario "un gran cambio ideológico" así como un "cambio político" y un "compromiso económico" con los países en vías de desarrollo, que requieren de apoyo del Norte para impulsar los derechos de sus ciudadanas. En rueda de prensa posterior al acto institucional del Parlamento Europeo para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, Alberdi incidió en la urgencia de un "cambio ideológico fundamental" sobre la forma de ver a los hombres y las mujeres, lo que en su opinión sólo se consigue con campañas de sensibilización, "la educación y la formación".
En cuanto al "cambio político", Alberdi pidió "que se adopten de verdad medidas encaminadas a luchar contra la violencia" y reivindicó "leyes nuevas con planes de implementación" que promuevan "cambios de actitud". En este sentido, puso el acento en las medidas punitivas contra los agresores porque en su opinión, la impunidad del agresor es "el peor ejemplo que se puede dar a las siguientes generaciones".
Por último, sobre el cambio económico, la responsable de UNIFEM señaló que mientras los países occidentales "llevan años" destinando enormes recursos a luchar contra la violencia machista, los países menos desarrollados "requieren fondos" para poder hacer lo mismo "y el Parlamento Europeo puede tener mucho que decir" sobre este asunto.
Con todo, Alberdi destacó "la seriedad del compromiso del PE en la lucha contra la violencia de género" y expresó su "satisfacción porque una institución tan importante lo ponga en el centro de su agenda política" y esté "dispuesta a hacer un esfuerzo intenso en neutralizar, acabar y terminar con la violencia".
Durante la intervención ante los medios, Alberdi estuvo acompañada por la presidenta del Comité para los Derechos de la Mujer del Parlamento Europeo, Eva Britt-Svensson, quien destacó la importancia de "aunar fuerzas" en la lucha contra esta lacra social y puso el acento en el mensaje central de la campaña europea contra la violencia: "Podemos pararla". "No es algo que necesariamente deba perpetuarse, podemos acabar con la violencia sobre las mujeres", aseguró.
BRUSELAS, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
UNIFEM promueve el reconocimiento de los derechos fundamentales de las mujeres y su seguridad, orientando sus actividades hacia cuatro objetivos estratégicos:
Reducir la pobreza y la exclusión de las mujeres; Poner fin a la violencia contra las mujeres; Reducir la propagación del VIH/SIDA entre mujeres y niñas; Apoyar la función de liderazgo de las mujeres en la gestión pública y en la reconstrucción post conflicto.
UNIFEM, cuya sede central está en Nueva York, dispone de quince oficinas regionales desde las que se gestionan proyectos en Asia, Iberoamérica, Caribe, África y Europa Oriental. Próximamente se establecerá un enlace de UNIFEM en Madrid. No en vano, España es el segundo donante al Fondo, que se nutre de contribuciones voluntarias de los Estados miembros de Naciones Unidas, con una contribución de 11 millones de euros en 2007, de la que 3 millones de euros se destinaron íntegramente al Fondo para Eliminar la Violencia contra las Mujeres. UNIFEM gestionará durante 2008 una cantidad próxima a los cien millones de dólares. España, siguiendo una política decidida de apoyo a UNIFEM, tiene previsto prácticamente duplicar su contribución voluntaria durante 2008, con lo que se convertiría, previsiblemente, en el primer contribuyente entre los Estados miembros de Naciones Unidas.
Alberdi nació en 1948 en Sevilla y es doctora en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid, donde era profesora antes de su designación en UNIFEM. Entre el 2003 y el 2007 fue diputada en la Asamblea de Madrid por el Partido Socialista y sus especializaciones en género son participación política y violencia, dos de las áreas prioritarias para UNIFEM
Ya retornada de América Latina –donde lamenta haber podido visitar sólo Uruguay y Brasil-, responde la entrevista telefónica desde las oficinas centrales de UNIFEM en Nueva York.
-¿Qué balance hace de su reciente visita al cono sur de América Latina?
- Fue muy interesante. Estuve en Montevideo, Río de Janeiro y Brasilia, y me encontré con muchas personas y organizaciones que están trabajando muy bien por los derechos de las mujeres. También visité nuestras oficinas para la región y quedé muy satisfecha porque están muy activas. En Brasil sobre todo tuve muchos encuentros y profundicé sobre una práctica política para destacar: la bancada femenina del Parlamento, un muy buen ejemplo para otros países. Son mujeres parlamentarias de todos los partidos que trabajan juntas para la aprobación de leyes de género y que les va muy bien. Pero además, la pertenencia a la bancada las fortalece al interior de sus propios partidos.