Escriba el tema que desea buscar en este blog

jueves, 3 de noviembre de 2011

La ONU alerta de que el cambio climático mermará los avances logrados en el desarrollo humano

En los últimos 40 años, los países más pobres progresaron un 82% en el índice de la ONU que mide la calidad de vida
Un vuelco preocupante. Con este pesimista augurio abre Naciones Unidas su último informe sobre desarrollo humano, presentado hoy en Copenhague (Dinamarca), en el que advierte del riesgo de que en muchos países, sobre todo en los más pobres, se dé un paso atrás en los avances logrados en las últimas cuatro décadas en la mejora de la calidad de vida. Y se fija en una amenaza: el deterioro del medio ambiente.

Informe de la ONU sobre Desarrollo Humano 2011
Entre 1970 y 2010, las economías más atrasadas avanzaron un 82% en el índice de desarrollo humano (IDH), duplicando el promedio mundial. Y si se mantuviera ese ritmo, para mediados de siglo la mayoría de los países de ese grupo habrá alcanzado el nivel de desarrollo actual de los que hoy se encuentran primeros en la clasificación. Convergencia que, sin embargo, está en peligro y podría frenarse "abruptamente" por el impacto del problema medioambiental. Es, como señala Bill Orme, director del informe independiente que publica la ONU, una forma diferente de ver el reto del cambio climático, como factor que potencia el círculo vicioso del empobrecimiento. De hecho, son los países en desarrollo los que empiezan a desmarcarse del patrón para 2050. "Los más pobres son los que más sufren por la degradación del medio".
El informe dibuja dos nuevos escenarios de lo que puede suceder en el índice de la calidad de vida si no se afronta ese reto. En una situación de "desafío ambiental", se observaría una caída del 8% con respecto a la tendencia media proyectada a escala global para 2050. Esa corrección se doblaría para entonces al 15% en un marco hipotético de "catástrofe ambiental".

El programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo pide por ello "acciones decididas" para evitar que los avances logrados por los países pobres se frenen. "La sostenibilidad es un asunto de justicia social. No es solo un tema ambiental", afirma Helen Clark, responsable del PNUD. "Debemos ser conscientes de que todo lo que hacemos tiene consecuencias".
La crisis económica, insisten los relatores, "no es excusa". Y aprovechan para hacer causa intelectual por el impuesto sobre las transacciones internacionales para financiar el desarrollo. Técnicamente, dicen, es posible. Y con una tasación "minúscula" (0,005%) puede obtenerse un gran volumen de fondos (40.000 millones de dólares al año) sin afectar al comercio.
La ONU recuerda que vivir en un ambiente saludable es un derecho, no un privilegio, por eso destaca la importancia de que se integre la igualdad social en las políticas medioambientales. Y resalta que la mitad de los casos de desnutrición se deben a factores medioambientales, como la escasez de alimentos por las sequías o la contaminación del agua.
Agravamiento de las desigualdades internas
Sin embargo, el problema no acaba con el cambio climático. En los últimos años, la distribución de los ingresos ha empeorado y se han agravado las desigualdades internas. En esta edición, la ONU ha analizado 187 países para elaborar su índice de desarrollo humano. Noruega aparece en el primer lugar, seguido por Australia y los Países Bajos. En la cuarta posición figura EE UU, pero cuando se tiene en cuenta el factor de la desigualdad, cae al 23. "Cuando se contabilizan las desigualdades internas en materia de salud, educación e ingresos, algunas de las naciones más ricas del mundo quedan excluidas de los primeros lugares", explica Milorad Kovacevic, responsable del índice. Es lo que sucede también con Corea del Sur e Israel. Con este factor, la ONU espera completar su controvertido análisis.

Hay otros países en los que, sin embargo, se observan mejoras. Es el caso de España. Su índice de desarrollo humano sigue en el puesto 23 si se utilizan los mismos parámetros que se han repetido en el informe desde 2005. Si se comparan simplemente las clasificaciones de un año y otro, hay un ligero retroceso del puesto 20 al 23. pero esto, advierte Naciones Unidas, no debe hacerse, porque de un año a otro se miden aspectos diferentes (aquí entra en acción el impacto que se le ha dado este año a los factores medioambientales) y otros, como que se inciorporan nuevos países a la lista. Sin embargo, cuando se tiene como referencia el factor desigualdad, España escala seis posiciones, situándose en el puesto 17. Una evolución similar se ve en Suecia, el país más avanzado en igualdad de género, y en Dinamarca o Eslovenia.
"El acceso a la salud y a la educación son tan importantes para la ecuación como los ingresos", señala el relator del estudio, a la vez que afirma que "estos datos corroboran que estamos antes grandes desigualdades en muchos países". En lo más bajo de la lista de desarrollo humano aparecen República Democrática del Congo, Níger y Burundi.
España
Sobre españa, aparte de las consideraciones generales como su puesto en la clasificación, el informe destaca varios aspectos. Por ejemplo:
- Es de los países con una mayor apuesta por el energía solar.
- Se han puesto en marcha políticas para gravar las transacciones financieras con el fin de disminuir la desigualdad.
- Mantiene una tendencia estable en la clasificación desde 2006 (igual que la tienen Noruega y Australia en los dos primeros puestos).
- Ocupa el puesto 13º en el índice de desigualdad de género.
- De los índices medioambientales, la mayor satisfacción está en la calidad del agua (el 83,6%). En Dinamarca es del 97,4%. La satisfacción general con la vida está en el 6,2 sobre 10 (en Noruega es el 7,6).
Ver más

Cumbre del Cambio Climático de Durban generará 15.000 toneladas de CO2

La factura ecológica de la cumbre, reunirá a 20.000 delegados, según el Gobierno de Sudáfrica, y 50.000 activistas

La próxima Conferencia contra el Cambio Climático de Naciones Unidas (COP17), que arrancará en la ciudad sudafricana de Durban a finales de este mes, generará 15.000 toneladas de CO2, según apuntó el Gobierno municipal.

La factura ecológica de la cumbre, que reunirá a 20.000 delegados, según el Gobierno de Sudáfrica, y 50.000 activistas, según las organizaciones civiles, se calculó en base a los consumos previstos de electricidad, agua y gas y los desplazamientos hasta el centro de conferencias.

Asimismo, se tuvieron en cuenta el alojamiento de los asistentes y la contaminación generada en otros recintos y en el propio paseo marítimo de la localidad, explicó el Ayuntamiento de Durban, según publicó hoy el diario sudafricano Business Day.

Las emisiones de la Conferencia del Cambio Climático equivalen al volumen total de CO2 que el volcán islandés Eyjafiallajokul expulsó en su primer día de erupción.

Como medida para intentar paliar el efecto del CO2, Durban anunció que pondrá a la venta bonos de emisiones entre los miembros de las delegaciones que acudirán al COP17, y con el dinero que se obtenga se llevarán a cabo acciones que mitiguen el impacto ambiental de la cumbre, según el departamento de Gestión Ambiental del municipio.

Los bonos, que recibirán el nombre de "Créditos CEBA" (Comunidad Basada en la Adaptación al Ecosistema, según sus siglas en inglés), tendrán un precio de 10 dólares o 100 rands, que equivalen a 11 euros, que se destinarán a la reforestación del área de Umbilo, al oeste de Durban.

Se pretende así contribuir al desarrollo de las comunidades locales y retirar de la atmósfera el CO2 mediante la fotosíntesis de los árboles.

Se calcula que una hectárea forestal es capaz de absorber entre 3 y 15 toneladas de dióxido de carbono al año, según un estudio realizado en 2008 por la Asociación Forestal de la provincia española de León (Asfole).

Roberts aseguró que el proyecto de Umbil, que consistirá en la plantación de árboles autóctonos y la recuperación de las praderas y cursos fluviales, logrará retirar de la atmósfera 16.000 toneladas de CO2, mil más que las generadas por el evento.

Los países integrantes de la Convención contra el Cambio Climático de las Naciones Unidas se reúnen del 28 de noviembre al 9 de diciembre en Durban, en el este de Sudáfrica, con el reto de renovar el límite de emisiones del protocolo de Kyoto, que expira en 2012, y mantener el aumento de la temperatura global por debajo de los 2 grados centígrados.
Ver más

Países de América se unen para enfrentar el Cambio Climático en la agricultura

El director general del IICA, Víctor Villalobos, hace uso de la palabra en la ceremonia inaugural del Seminario. Lo acompañan, desde el presídium: Rafael Echeverri, PROTERRITORIOS; Julio Calderón, Consejo Agropecuario Centroamericano; Rubén Beltrán, Secretaría de Relaciones Exteriores; y Gino Buzzetti, Representante del IICA en México
El Cambio Climático global es un desafío de gran trascendencia para el planeta y la humanidad, y la agricultura es uno de los sectores de la economía más vulnerable a sus efectos.
La vulnerabilidad de la agricultura se debe a la gran dependencia que tiene la productividad y estabilidad de las actividades agrícolas respecto de las variables climáticas, especialmente de la fragilidad en el corto plazo de la propia producción y de los activos de los que depende, frente a episodios extremos de sequías, precipitaciones y vientos. Igualmente, frente al cambio de las condiciones ambientales de largo plazo en las que está inserta, que será más profundo y más pausado, sin descartar cambios abruptos.

Ministra de Agricultura de Costa Rica, Gloria Abraham; secretario de Agricultura de Honduras, Jacobo Regalado; representante de la FAO en México, Nuria Urquía; y la Dra. Cecilia Conde, de la UNAM
De acuerdo con las evaluaciones y los pronósticos más recientes y reconocidos, los cambios de temperaturas y precipitación traerán consecuencias negativas que se verán reflejadas de manera asimétrica en la mayoría de los países. Se prevé que los efectos del Cambio Climático generen un gran deterioro de los suelos agrícolas, erosión, desertificación, degradación y procesos de salinización. Se espera, además, que estos procesos generen cambio en los usos de suelo, convirtiendo muchas de las áreas boscosas y de laderas en áreas de cultivo.
El IICA asume el desafío
El Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), haciendo suya la preocupación por este fenómeno en América, ha creado el PRICA-ADO, un programa de cooperación técnica intergubernamental, integral y permanente, que contiene agendas nacionales y una agenda regional para desarrollar competencias y fortalecer capacidades en México, Centroamérica y Colombia, para la gestión territorial de procesos de adaptación de la agricultura a los efectos del Cambio Climático.
En este marco se efectuó en la Ciudad de México, los días 26 y 27 de septiembre último, el Taller Internacional “Adaptación de la Agricultura al Cambio Climático”. En la oportunidad, representantes de gobierno, universidades, centro de investigación y organismos regionales, crearon la Red Científica Técnica del PRICA-ADO que dará soporte conceptual, metodológico y operativo a los esfuerzos de los países integrantes del programa para enfrentar los desafíos que tiene la agricultura ante las alteraciones ambientales.
El Director General del IICA, Víctor Villalobos, destacó en el evento que para adaptar la agricultura a los nuevos desafíos el camino más viable es el de la innovación, ya que así podremos aumentar la productividad, ofrecer más y mejores productos en el mercado y controlar de manera más eficiente y sustentable las plagas y enfermedades. Estas acciones tienen como fin incluir a los territorios rurales y sus habitantes en una dinámica de desarrollo que les mejore su nivel de vida, pero sobre todo para hacer de las políticas públicas, políticas de Estado, agregó.
El reto para el año 2050, dijo, es alimentar a nueve mil millones de habitantes en el mundo con la misma superficie agrícola y menos disponibilidad de agua. A su juicio, hoy estamos frente a un nuevo paradigma de desarrollar una agricultura productiva, sustentable e incluyente socialmente.
La Red del PRICA-ADO, en su Nodo internacional, quedó conformada por Belice, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá y República Dominicana; así como por los representantes de organismos internacionales con presencia en la región, como CEPAL, PROTERRITORIOS, CATIE y CIAT.
Para su operación se estableció un Comité Directivo Provisional y la Secretaría Ejecutiva Internacional quedó radicada en el IICA, Oficina México.
El objetivo general de la red es impulsar la articulación entre académicos, investigadores y técnicos institucionales en los distintos niveles administrativos territoriales, desde lo regional hasta lo local, para generar información, desarrollar o fortalecer capacidades y apoyar la política pública en la gestión territorial de los procesos de adaptación.
PANEL ESPAÑOL. José Luis Samaniego, de la CEPAL; Gustavo Cárdenas, del IICA; Manuel Calderón, de la embajada de España; Rafael Echeverri, PROTERRITORIOS; y Peter Holmgren, de la FAO.
Para Martha Lucía Alviar, consultora del IICA y líder del Programa del PRICA-ADO, el Cambio Climático implicará una reconfiguración de la geografía productiva de cultivos y variedades, las que se reflejan principalmente en incrementos de producción en algunas zonas y disminución en otras; ampliación o reducción de áreas de cultivo; incrementos en las zonas de afectación de plagas y enfermedades e incremento de la ocurrencia de eventos extremos.
“Todos estos aspectos significan un cambio de escenario que introduce mayor incertidumbre a la producción de alimentos acorde al incremento de la demanda mundial, debido al crecimiento de la población y el ingreso, así como a los cambios en hábitos de consumo. Lo anterior constituye un enorme desafío frente a la necesidad de minimizar los impactos negativos y maximizar sus efectos positivos sobre la productividad de la agricultura”, señala.
La importancia del enfoque territorial
El reconocimiento de la agricultura como un sistema complejo, que va más allá de la producción misma y de los cultivos, incluso, más allá de los sistemas productivos en el marco de los cuales se desarrolla, conduce a la necesidad de abordar las dimensiones espaciales que entrelazan la naturaleza, la población, las formas económicas de aprovechamiento de la oferta ambiental y las condiciones culturales y políticas de la institucionalidad dentro de un territorio.
Asimismo, implica entender el cambio climático como un conjunto de dimensiones ambientales que interactúan en esos mismos espacios territoriales, con cada uno de los componentes que lo conforman.
“Esta complejidad del sistema climático y de las actividades de uso y aprovechamiento del patrimonio ecológico, agrega la consultora del IICA, obligan a ver la adaptación como un proceso de planeación territorial dinámica, donde desde el diagnóstico hasta la prospectiva, deben concebirse con una perspectiva integral”.

CLAUSURA. En la ceremonia de Clausura: Julio Calderón, Gino Buzzetti y Martha Lucía Alviar, líder del Programa PRICA-ADO.
Por lo mismo, la estrategia del Programa se centra en un análisis prospectivo y territorial del efecto del cambio ambiental sobre la oferta de los sistemas agroecológicos y su potencialidad, desde un enfoque holístico y sistémico y con la participación de los actores involucrados.
Su planteamiento permite ver la adaptación al cambio climático como una oportunidad de desarrollo de las zonas agrícolas, de acuerdo a sus potencialidades, teniendo presente los desafíos que esto implica. Plantea un análisis de la situación de variabilidad, a través del análisis espacial de los escenarios de cambio climático y la evaluación de los escenarios futuros de la aptitud del uso de las tierras.
Para Martha Lucía Alviar, uno de los aspectos fundamentales dentro de estos planteamientos es que la región y los actores relacionados con el sector agrícola entren en un proceso de acciones orientadas a crear capacidades para la adaptación. Entre estas acciones destaca la de crear estrategias específicas en la generación y uso de información geo-espacial y estadística, de carácter geoprospectivo, que oriente la investigación y el desarrollo de modelos científicos y cambios culturales, para el desarrollo institucional de capacidades locales y de apoyo a la formulación de políticas públicas.
PARTICIPACIÓN. Los más de cien asistentes al seminario tuvieron una activa participación con sus preguntas y comentarios.

PARTICIPACIÓN. Los más de cien asistentes al seminario tuvieron una activa participación con sus preguntas y comentarios.

Por lo mismo, el Programa busca fortalecer las capacidades técnicas de las instituciones nacionales y regionales responsables de procesos de adaptación. Esto debe conducir a la construcción y actualización de escenarios prospectivos de los cambios en la aptitud y potencialidad y a un Sistema Interactivo de Información Geoprospectiva, que ayude al diseño de los procedimientos de evaluación de tierras que normen la planeación territorial para la adaptación y, en consecuencia, al desarrollo de capacidades técnicas e institucionales en la formulación y gestión de políticas públicas y modelos de planeación para la adaptación.
Para la conformación de los nodos nacionales cada país integrante del PRICA-ADO lleva a cabo un Foro Nacional, convocando a representantes de las instituciones académicas, de investigación y del estado, que tienen directa relación entre el tema eje de la red: “Adaptación de la agricultura al cambio climático”.
Para cumplir con estos objetivos y apoyar a los países en la construcción de una agenda regional y sus respectivas agendas nacionales, el Programa contempla el establecimiento de tres componentes de acción:
desarrollo y fortalecimiento de las capacidades nacionales y regionales técnico-científicas en los actores de los territorios (stakeholders);
generación y sistematización de información para encarar acciones de adaptación al cambio climático. En particular, se pretende reducir las incertidumbres a través de información relevante para generación de escenarios geoprospectivos en los territorios;
estrategias y políticas públicas acordes a los cambios que se detecten en la aptitud, vulnerabilidad u oportunidades de los escenarios considerados como resultado del cambio climático.
La consultora del IICA finaliza señalando que la RED establecerá espacios de debate entre academia, centros de investigación e instituciones públicas, sobre conceptos, experiencias, metodologías y buenas prácticas de gestión de políticas, creando canales de información y comunicación que posibiliten la óptima utilización de los recursos disponibles. Para ello se pondrá en operación una plataforma de intercambio virtual de debate, información, documentación y buenas prácticas en la región como soporte de la red.
En el corto plazo se pretende realizar la primera reunión del Nodo Internacional de la RED, para establecer la definición de los lineamientos estratégicos que los guiarán, la agenda y la definición del Comité Directivo Permanente. Actualmente, cada país está en el proceso de institucionalizar sus nodos nacionales y de establecer sus propias agendas de trabajo que darán pie a la concreción de los objetivos del PRICA-ADO, situación que se espera concretar antes de diciembre del presente año.
VER MÁS

Entradas (Spots) del Blog