POR FIONA HARVEY / THE GUARDIAN Y CLARÍN
El análisis más completo realizado hasta la fecha advierte sobre los riesgos que corren.
Unicef sostiene que siempre se dejó a los chicos al margen del debate.
Los niños serán los más afectados por el impacto del cambio climático debido a su mayor riesgo de problemas de salud, desnutrición y migración, según un nuevo estudio que se dio a conocer el lunes 23. Por otra parte, es probable que los precios de los alimentos experimenten un fuerte aumento como consecuencia del calentamiento, lo que revertiría el progreso que se ha hecho en lo relativo a combatir el hambre en el mundo.
Los resultados del estudio se difunden en momentos en que científicos iniciaron una reunión en Estocolmo para producir una amplia evaluación de lo que sabemos sobre el cambio climático. En estos días, el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC por la sigla en inglés), que reúne a los principales especialistas del mundo, elaborará los detalles de un mensaje dirigido a los gobiernos del planeta.
Pronósticos
Se estima que advertirán que es casi seguro que el cambio climático sea producto de acciones humanas y que derivará en un incremento de la temperatura global de más de dos grados, lo que tendrá efectos como la reducción del casquete de hielo del Ártico y los glaciares, un aumento del nivel del mar de casi un metro para fin de siglo y precipitaciones torrenciales en partes del planeta.
Unicef sostiene que si bien los niños son más vulnerables a los efectos del calentamiento global, en su mayor parte han quedado fuera del debate. “Avanzamos hacia un futuro donde los avances logrados para los niños del mundo se ven amenazados y donde su salud, bienestar, subsistencia y supervivencia corren peligro (…) a pesar de que son los menos responsables de las causas”, dijo David Bull, el director ejecutivo de Unicef en Gran Bretaña.
Cuando cumplan 18
Los niños que nacieron el año pasado cumplirán la mayoría de edad en 2030, momento para el cual es probable que los efectos del cambio climático sean más evidentes en forma de sequías, inundaciones y tormentas. En los diez países más vulnerables, entre ellos Bangladesh, India y Filipinas, hay 620 millones de niños menores de dieciocho años.
Unicef estima que otros 25 millones de chicos padecerán desnutrición debido al cambio climático, mientras que 100 millones más se verán en una situación de inseguridad de alimentos en la que ellos y sus familias podrían verse obligados a huir. Los niños que integren el grupo de entre 150 y 200 millones de personas que se estima tendrían que abandonar su hogar como consecuencia del cambio climático sufrirán más que los adultos debido a su relativa falta de recursos y mayor vulnerabilidad a enfermedades.
Durante las olas de calor, que se pronostica se harán más intensas y frecuentes, los bebés y niños pequeños tienen más probabilidades de morir o sufrir golpes de calor porque les resulta difícil regular su calor corporal.
Las cifras del hambre
Otro informe, esta vez de Oxfam, advirtió que el calentamiento global causaría un rápido incremento de los precios de los alimentos, lo que tendría graves consecuencias en los países pobres. Oxfam enumeró recientes ejemplos de condiciones meteorológicas extremas que han provocado escasez de alimentos y aumentos de precios y citó estimaciones científicas que indican que es probable que eso se haga más frecuente a medida que el calentamiento continúe. “En la actualidad, una de cada ocho personas se va a dormir con hambre. El análisis sugiere que la cantidad de personas que corren el riesgo de pasar hambre aumentaría entre 10 y 20 por ciento para 2050 como consecuencia del cambio climático”, determinó el estudio.
Los autores mencionaron la sequía de 2012 en Rusia, que redujo un 25 por ciento la cosecha de granos, lo que derivó en un marcado aumento de los precios del pan y los granos, así como en un grave endeudamiento de muchos agricultores. El mismo año, la peor sequía en cincuenta años en el medio oeste de los Estados Unidos redujo una cuarta parte el rendimiento del maíz y generó un incremento de los precios de 40 por ciento. Dos años antes, devastadoras inundaciones en Paquistán destruyeron 570.000 hectáreas de cultivos y en algunas zonas se perdió el 80 por ciento del alimento almacenado.
Tim Gore, de Oxfam, señaló: “Queremos un mundo en el que todos gocen del derecho a alimentos nutritivos y accesibles, y no podemos permitir que el cambio climático nos aparte de ese camino. Los gobernantes que escuchen esta semana las últimas conclusiones de los científicos especialistas en clima deben recordar que un mundo caliente es un mundo hambriento. Tienen que tomar urgentes medidas para reducir las emisiones y dedicar más recursos a crear un sistema alimentario sostenible.”
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COP18: Tim Gore, Policy Advisor, Oxfam International from Responding to Climate Change on Vimeo.
